Acreditaciones - IECS

Bienvenidos a este blog

El objetivo de este blog de Protocolo y organización de eventos, es compartir los temas que surgen en nuestro foro Área de Postgrado de Protocolo, Ceremonial y Wedding Planner.
Desde 1985 nos dedicados a la formación de expertos, a través de máster y cursos superiores.
Esperamos que disfrutéis tanto como nosotros.

Nùria Pereira Martínez
Directora. Instituto Europeo Campus Stellae

Historia del BESO

Cursos, máster
subvenciones - becas
Área Protocolo, Ceremonial, Heráldica y Eventos
Asesoramiento : 0034 + 981 940809 


Historia del beso
Para nosotros, el beso es algo tan habitual que ni siquiera nos paramos a pensar en su significado, cómo surgió, qué diferencias hay entre unas culturas y otras. Pero también algo cotidiano como esto también tiene protocolo.
Existen varias versiones sobre el origen de esta expresión de afecto. Lo que sí podemos afirmar es que no fue hasta el siglo VI que empezó a surgir entre adultos como saludo y muestra de afecto. Surgió en Europa desde donde se extendió al resto del mundo.
Pero hasta el beso ha sufrido las presiones de la censura, que en la Revolución Industrial fue reducido al ámbito privado, prohibiéndose de forma pública, hasta que en mayo del 68, el beso se convirtió en símbolo de rebeldía.



Históricamente, se habla de besar el suelo, cuando la persona que teníamos delante era de gran relevancia. Los celtas utilizaban el beso como poder curativo. En la Edad Media, los caballeros que besaban a una dama estaban obligados a casarse con ella. A personas con un nivel social mayor se les besaba la mano y a los iguales se les besaba en la mejilla pero a las damas se les debía besar en la mano, nunca en la cara.
Podemos decir que la utilización como saludo es bastante reciente hasta que se ha considerado como un acto aceptado. Incluso, hoy en día, hay sociedades en las que no está bien considerado.
Los europeos, los que más besan en las presentaciones, suelen dar uno o dos besos en la cara. Los segundos del ranking podemos decir que son los suramericanos, teniendo como costumbre utilizar tan solo un beso.
Los norteamericanos, teniéndolo como costumbre aceptada, tienden a utilizarlo discretamente.
En el último puesto quedan los Orientales, que son los más reticentes a utilizarlo como forma de saludo en público.
Sea como fuere, este gesto ha evolucionado hasta ser incluido en recepciones, entregas de premios y demás actos públicos, por Reyes, como gesto de respeto o de afecto, siempre ofrecido por parte de la persona de más rango y nunca los de menor nivel social a ellos.
Como regla general, al igual que con otros muchos actos y gestos, siempre debe tratarse con discreción y respeto.
 

No hay comentarios: